La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Libro, asilo, insecto ó espacio turbio,
Signo, turista o campesino enfermo.
Que más traes en tu fino equipaje,
Otro disfraz, otro mal comienzo.
Golpe, pupila, sueño o falso olvido,
Hoja, herida, naipe ó texto visto.
Que más traes en tu sombría palidez,
Por que comprás en tu vieja estafa.
La piedra que dejaste por armar tu razón,
Hoy vino a ser el ángulo cabeza vital.
Si cae encima aplasta, maquillaje mortal,
Caer sobre esta piedra horizonte de paz.
La mesa cubierta, me llama, para descansar,
Con nombre me invita, su brazo otra vez está...