La música cristiana es de origen judío: la liturgia musical de la sinagoga, en particular el canto psalmódico de los judíos como unidad poética musical, fue un legado preciado transmitido del Israel antiguo al cristianismo primitivo, como forma de manifestar tanto a nivel personal como comunitario las creencias religiosas y la fe en Dios.
Es su corazón que brillará por siempre
brillo en las manos de Dios,
brillo en las manos de Dios.
Es tan fácil acabar
quebrado y perder
de vista a quien te levantó.
El maestro se inclinó
tomo agua y comenzó
a lavar los pies de este dolor.
Es su corazón que brillará por siempre
brillo en las manos de Dios,
brillo en las manos de Dios.
Hijo, como te encontras
ahora comenza a lavar
los pies con mi amor.
De esta forma lo harás
y un manto cubrirá de alivio
tanta sin razón.
Porque me amó
decidió amarme hasta el fin
porque me amó
él me dio esta vida junto a él
porque me amó
me salvó.
Siempre que clamé él me oyó,
todos los humildes serán saciados,
los que lloran van a ser consolados,
todos los que buscan a Dios, lo encontraran.
Es su corazón, ohoh